Ante los hechos que se han suscitado en la ciudad de Mérida desde la mañana del lunes, el rector de la Universidad de Los Andes (ULA), Mario Bonucci Rossini, anunció la suspensión de actividades académicas y administrativas hasta nuevo aviso, por lo que este martes laborarán solamente el Centro Ambulatorio Médico Integral de La Universidad de Los Andes (Camiula) y la Dirección de Vigilancia.
Asimismo, el Rector hizo un llamado a la calma, destacando la necesidad de encontrar salida a los conflictos mediante el diálogo, resaltando que “el arma más fuerte que poseemos los universitarios es la palabra, la violencia es mala, venga de donde venga, la protesta es un derecho que poseemos todos los venezolanos pero debe realizarse con respeto”.
Finalmente, hizo un llamado a las fuerzas del orden público para que resguarden debidamente las instalaciones universitarias, teniendo en cuenta que las mismas han sido atacadas en repetidas ocasiones durante los últimos meses.
Luego de un lunes lleno de violencia que dejó como saldo varias instalaciones universitarias destrozadas, así como daños de considerable magnitud a la propiedad privada y, sobre todo, la lamentablemente muerte de dos jóvenes merideños, el Consejo Universitario (CU) de la Universidad de Los Andes (ULA) decidió realizar una sesión extraordinaria para fijar posición al respecto, coincidiendo todos en una condena enérgica contra los hechos ocurridos.
El rector de la ULA, Mario Bonucci Rossini, expresó, una vez concluida la sesión, que todos los consejeros de la universidad, así como la comunidad universitaria en general, lamentan las muertes ocurridas el día lunes, destacando que “la muerte de un joven es la muerte de la esperanza, por eso nos hacemos solidarios con los familiares de estos jóvenes fallecidos”.
En ese sentido, expresó que los universitarios condenan la violencia “venga de donde venga”, ya que la misma solamente conduce a desenlaces tan lamentables como los que hoy entristecen al pueblo merideño y al país en general. No obstante, el Rector expresó, en nombre del CU, el rechazo a declaraciones “en las que intenten culpar a la institución, a las autoridades y, sobre todo, a estudiantes de nuestra universidad” sobre las tragedias ocurridas.
Igualmente, los consejeros exhortaron a las autoridades de la región y a quienes comanden las fuerzas de seguridad del Estado para que protejan los bienes e instalaciones universitarias, ya que nuevamente la ULA fue víctima de ataques sin que los organismos responsables del orden intervinieran para proteger la integridad de sus instalaciones e incluso de los trabajadores.
En ese sentido, se pudo conocer que la principal casa de estudios del país sufrió el destrozo del Decanato y el Centro de Estudiantes de la Facultad de Ciencias Económicas y Sociales (Faces), los cuales fueron incendiados, siendo consumidos por las llamas en su totalidad. Igualmente, fue quemada parcialmente la Federación de Centros Universitarios (FCU) ULA y destrozado el cafetín de la Faces.
El Rector, en nombre del máximo cuerpo de deliberación de la universidad hizo un llamado a “la paz, la prudencia y la tolerancia”, poniendo a la orden la universidad “que todas las fuerzas vivas del estado Mérida encuentren el escenario propicio para el diálogo y la construcción de esquemas de gobernabilidad de la ciudad, frente a los graves problemas que aquejan al país”.
Ratifican suspensión de actividades
Por otro lado, se acordó declarar al CU en sesión permanente dada la gravedad de los hechos ocurridos, ratificando además la suspensión de actividades docentes, tanto de pregrado como de postgrado, así como las administrativas en Mérida, Tovar y El Vigía, medida que se mantendrá “hasta nuevo aviso”.
No obstante, continuarán funcionando con normalidad durante estos días el Camiula en todos sus servicios, Vigilancia, Medios de Comunicación, Servicio Jurídico, personal ATO de los despachos de las autoridades, Bomberos ULA, Dirección de Asuntos Estudiantiles, Oficina de Seguros de la ULA, Bioterio y todos los laboratorios en los que se estén desarrollando actividades de investigación o extensión que no deban paralizarse, así como todos los postgrados que funcionan en el Ihula y las pasantías de Medicina.
Igualmente, se creó una comisión para la evaluación constante de los acontecimientos en Mérida, integrada por los profesores Argimiro Castillo como su coordinador, Luis Loaiza, el secretario José Andérez y el bachiller Leonardo Briceño.